Desahogo.
En tu río de caricias, zozobro,
sensuales labios con sed de besos,
tu boca, sedienta y placentera,
robando tus suspiros, te cobro,
mi lengua recitas tiernos versos,
se une a la tuya en enredadera.
Caliente mi sangre, no espera,
si esta tibio tu cuerpo, sobro,
como si el fuego nos huyera,
de apetito carnal, quien viviera,
despierto tu pasión, y luego obro,
un exquisito deseo, que desespera.
Sudor fresco, cae en desatino,
espeso, como miel de abeja,
para probarlo, lista estabas,
risa delirante, en boca bermeja,
bebí de tu néctar, como vino,
que es blanco, y huele a hierbas.
Persiste el gemir, sigo fuerte,
este amor, no guarda silencio,
me siento una amante, estrella,
en mis delirios, veo la muerte,
caminando tranquila, y despacio,
he sentido una sensación, muy bella.
Luzille Medina.
Abril/13/2014.
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por el Autor.
USA.
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